El pasado sábado fue 23 de abril, es decir, el "Día Internacional del Libro", el "Día de Castilla y León" y "Sant Jordi" en Barcelona. Respecto a esto último, me gustaría comentar que escuché en Sevilla a una chica decir lo siguiente mientras hablaba por el móvil: "Mamá, ¡es que es Sant Jordi!" (o algo similar), que a mí me pareció un comentario totalmente fuera de lugar y que me sentó mal porque creo que es una tradición barcelonesa aunque este año la "Casa del Libro" haya decidido regalar una rosa por la compra de un libro, lo que no deja de ser una imagen algo fuera de lugar en la primavera sevillana.
Hacía ya dos años que no me compraba ningún libro el 23 de abril y que no publicaba este tipo de entradas en el blog. La explicación está en que el año pasado coincidió con el Jueves de Feria (se sobreentiende que hablo de la famosa "Feria de Abril") y estuve gran parte del día en el recinto ferial. Hay unas cuantas cosas en las que la casualidad ha hecho que coincidan bastante los "Días del Libro" de 2015 y 2016: el haber sido dos días muy intensos en los que no tuve siquiera unos minutos para leer unas pocas páginas de una novela pero sí para hacer un rápido repaso a las redes sociales y "Regina".
El sábado conseguí sacar cinco minutos para comprar un libro aprovechando que había un 10% de descuento. En la librería de "El Corte Inglés" de la Plaza del Duque me compré una novela que salió a principios de abril y que es "El tiempo es el que es" publicada por Plaza & Janés y escrita por Anaïs Schaaf y Javier Pascual, guionistas de la serie de TVE "El Ministerio del Tiempo", de la que soy fiel seguidora desde que estrenaron la primera temporada y que me encanta, y prólogo y edición de Javier Olivares, creador de dicha serie. Se trata de una novela basada en la citada serie, ya que cuenta tres misiones protagonizadas por Julián, Amelia Folch y Alonso de Entrerríos (me divierto mucho viendo cómo se adapta este último personaje al siglo XXI y otro que también me parece muy divertido es Velázquez), y que han publicado aprovechando el parón que han hecho en la segunda temporada de la serie, que esta noche vuelve a emitirse tras dos semanas de parón sin Pacino (me ha encantado el personaje interpretado por Hugo Silva). La novela cuesta en papel 16,90 euros, que con el descuento se quedó en 15,21 euros, y a la que he decidido darle una oportunidad tras saber que otro fiel seguidor de la serie como es el escritor sevillano Antonio Puente Mayor ha disfrutado muchísimo de su lectura y quien ha comentado que mantiene el mismo nivel de la serie.
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